POLITICA
30 de abril de 2025
El debate en la Ciudad: El kirchnerismo como blanco y un show de ataques, ausencias y marketing"

En una noche llena de cruces afilados, chicanas y estrategias llamativas, los candidatos a la Legislatura porteña desviaron el foco de los problemas cotidianos de la ciudad y se centraron en un enemigo común: el kirchnerismo.
El primer y único debate entre los 17 candidatos a legisladores de la Ciudad de Buenos Aires se llevó a cabo en un estudio de Canal de la Ciudad, con una producción técnica impecable y bajo el estricto Código Electoral porteño. Sin embargo, lo que se suponía que sería una discusión centrada en los desafíos cotidianos de la ciudad, como la basura, la salud y la educación, terminó siendo una confrontación cargada de ataques políticos y estrategias de marketing que poco o nada aportaron a la agenda local.
El kirchnerismo fue el principal blanco durante más de tres horas de debate, con la palabra repetida hasta el cansancio por los representantes del PRO, los libertarios y otras fuerzas de derecha. En un giro curioso, nadie de los candidatos presentes se reivindicó como parte del kirchnerismo, pero todos lo mencionaron como el gran enemigo a derrotar.
Únete a nuestro Facebook https://www.facebook.com/almafuerteradio2022 y accede a las noticias más relevantes.
“Más tarde o más temprano el kirchnerismo va a volver a gobernar el país. La solución es llevar el modelo de la motosierra a todos los rincones”, disparó Manuel Adorni, mientras que Ramiro Marra se unió a la cruzada con un llamado a “unir fuerzas en la batalla contra los zurdos y contra el kirchnerismo”. En respuesta, Silvia Lospennato, la candidata del PRO, fue una de las más atacadas de la noche, siendo cuestionada no solo por los problemas urbanos de la ciudad, sino también por su respaldo al rumbo económico nacional. “Vamos a seguir acompañando el rumbo económico de la República Argentina”, afirmó con énfasis, mientras era desbordada por las críticas.
Pero la tensión también se vivió entre las propias filas de la oposición. Horacio Rodríguez Larreta, desde su lugar en la mesa, lanzó una crítica a su propio espacio, el PRO, al señalar: “Quiero agradecer al oficialismo porteño porque están haciendo campaña con todos los logros de mi gestión y no inauguraron una sola obra pública. Solo una plaza, y ni me invitaron”. La respuesta no tardó en llegar desde el lado de los que lo cuestionaban. Leandro Santoro no dejó pasar la oportunidad de cruzarlo con firmeza: “Santoro es Santoro, yo no me escondo atrás de nadie. Vine a dar pelea contra el abandono de Jorge Macri en la Ciudad y la crueldad de Javier Milei en el país”.
En cuanto a las escenas más llamativas, un momento insólito fue el enfrentamiento entre Yamil Santoro y Mila Zurbriggen, quienes se acusaron mutuamente de plagio estético. “¿Por qué copiaste toda la campaña?”, le preguntó Zurbriggen. “Fue una estrategia de marketing”, respondió Santoro con total calma. En otro cruce, Adorni lanzó una contundente frase hacia el joven docente Federico Winokur: “No te voy a hacer ninguna pregunta porque ningún comunista tiene habilidad moral para ocupar un cargo público”. Winokur no se quedó atrás y replicó: “Con tu gobierno el 70% de los jubilados cobra 366 mil pesos, no sé de qué te reís”.
La noche también estuvo marcada por ausencias y personalidades excéntricas. Vanina Biasi, quien presentó un certificado médico por neumonía bilateral severa, fue reemplazada por Luca Bonfanti, quien se autodenominó “zurdo, socialista, y orgulloso de ser lo que este gobierno odia”. En otro rincón, Eva Koutsovitis y Lula Levy debutaron en el escenario con nervios, mientras que la última, con humor ácido, se presentó diciendo: “Es verdad que soy una desconocida, pero creo que al resto los conocemos demasiado”.
Más allá del debate político, la noche estuvo plagada de show. Marcelo Peretta llegó con su barra y merchandising, mientras Caruso Lombardi se hizo notar con un toque futbolero. Yamil Santoro, por su parte, presentó su estrategia de marketing con un perro de moño rosa, asegurando que “los porteños amamos las mascotas”.
Mientras tanto, Santiago Caputo decidió no dar declaraciones y protagonizó un episodio de tensión con los reporteros, incluso llegando a insultar a uno de ellos y fotografiar su credencial.
A pesar de las arengas ideológicas, las frases de impacto y las estrategias de marketing, lo que menos se escuchó fue un verdadero debate sobre los problemas que atraviesa la Ciudad de Buenos Aires y qué modelo de ciudad quieren construir los futuros legisladores. En lugar de centrarse en soluciones concretas para la población, los candidatos prefirieron sumar puntos con ataques políticos y acciones mediáticas que bien podrían haber sido parte de una campaña publicitaria.