ACTUALIDAD
3 de abril de 2025
La carne, cada vez más cara: cae el consumo, crecen las ganancias y el negocio cierra perfecto

El informe de la Secretaría de Agricultura confirma un escenario favorable para el sector cárnico: más exportaciones, precios en alza y rentabilidad en niveles récord. Mientras tanto, el consumo interno sigue en caída y la carne se convierte en un lujo para los argentinos.
El mercado de la carne en Argentina atraviesa un proceso de transformación en el que los productores salen ampliamente beneficiados. La baja en el consumo interno, impulsada por la pérdida del poder adquisitivo, se ve compensada por el crecimiento de las exportaciones, lo que fomenta una mayor demanda de animales más pesados y una escalada de precios que dispara las ganancias del sector.
Según el informe de la Coordinación de Análisis Pecuario de la Secretaría de Agricultura, la cadena productiva vacuna atraviesa un "buen escenario general". Sin embargo, ese crecimiento se da a costa de los consumidores locales: la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (Ciccra) informó que el consumo de carne vacuna cayó un 5,4% en febrero respecto del mismo mes del año pasado, ubicándose en un promedio de 48,8 kilos anuales por habitante, el nivel más bajo en décadas.
Únete a nuestro Instgram https://www.instagram.com/almafuerteradio/ y accede a las noticias más relevantes
Mientras los argentinos comen cada vez menos carne, los productores encuentran incentivos en la mejora de los precios y en la reducción de costos de alimentación, en parte gracias a la baja de retenciones al maíz. "La suba de los valores de la hacienda y la mejora en la relación de precios para el animal más pesado ofrecen un incentivo interesante para el agregado de kilos", señala un informe de la Bolsa de Cereales de Rosario (BCR).
El análisis de Agricultura refleja los altos márgenes de rentabilidad que deja la actividad. En la cría, un establecimiento de 450 hectáreas en la Cuenca del Salado reportó un margen bruto de 186.981 pesos por hectárea en febrero, un 12% superior al de hace un año. En un modelo de ciclo completo en la región pampeana, el margen ascendió a 182.638 pesos por hectárea, un 11% más que en 2024. Pero el mayor salto se da en la invernada de alta producción, donde la rentabilidad trepó un 35% por encima del promedio histórico.
La escasez de novillos pesados en el mercado mantiene la demanda en alza y sostiene los precios. "La relación de precios entre un novillito liviano de 400 kilos (2.800 pesos el kilo) y un novillo de más de 460 kilos (2.750 pesos el kilo) es de apenas un 2% a favor del liviano, cuando en los últimos cinco años la brecha era más del doble", detalla el informe de la BCR. Esto empuja a los productores a apuntar a animales más pesados, que son los más requeridos en la exportación.
Por otro lado, la ecuación del feedlot también se mantiene favorable. Aunque la baja de retenciones redujo el precio del maíz, la relación insumo-producto sigue beneficiando al engorde a corral: se necesitan 80 kilos de carne para pagar una tonelada de grano, un 20% menos que el promedio histórico.
Mientras el negocio ganadero se fortalece, el consumo interno se desploma. Según datos del Mercado Ganadero Rosgan, la comercialización de carne en el primer bimestre del año fue la más baja de la historia. La carne, que supo ser un símbolo de la mesa argentina, se convirtió en un lujo inalcanzable para miles de familias.