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28 de septiembre de 2024
¡Alarma financiera! La deuda pública se dispara a US$ 455.000 millones y crece a un ritmo récord de US$ 4.444 millones por mes
El endeudamiento explosivo bajo la gestión de Milei y Caputo preocupa a los mercados. La megadevaluación ya no es suficiente para contener la crisis económica.
La deuda pública argentina ha alcanzado un nivel crítico, superando los US$ 455.935 millones en agosto, según datos revelados por la Secretaría de Finanzas. El aumento mensual promedio es alarmante, con US$ 4.444 millones adicionales cada mes, lo que refleja el agravamiento del panorama financiero en medio de una política económica marcada por fuertes ajustes y devaluaciones.
Este crecimiento vertiginoso en el volumen de deuda ha licuado los efectos de la megadevaluación aplicada en agosto por el presidente Javier Milei y su ministro de Economía, Luis Caputo. A pesar de la devaluación, que inicialmente había reducido la deuda a US$ 368.225 millones, el atraso cambiario y el creciente endeudamiento en pesos han vuelto a inflar la deuda hasta su nivel actual.
Los factores que impulsan esta escalada incluyen el predominio del endeudamiento ajustado por CER (62,8%), el cual se dispara con la inflación, mientras que el 29,9% corresponde a deuda en pesos sin ajuste y el 7,2% a deuda denominada en dólares pero pagadera en pesos. La persistente depreciación de la moneda y los ajustes por inflación agravan la situación, dejando a la economía en una posición más vulnerable.
Además, el informe revela que los adelantos transitorios del Banco Central al Tesoro también se han visto fuertemente afectados. Estos adelantos, que eran de US$ 11.349 millones en noviembre pasado, se redujeron a US$ 4.294 millones en agosto debido a la constante apreciación del dólar.
En términos locales, la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) informó que la deuda en pesos llegó a $182,5 billones en julio, con un crecimiento mensual del 9,6%. Entre agosto y diciembre, los servicios de deuda proyectados son de US$ 8.028 millones, lo que genera incertidumbre sobre la capacidad del gobierno para hacer frente a sus compromisos en medio de una situación económica cada vez más deteriorada.
La deuda pública sigue siendo uno de los puntos más críticos de la gestión de Milei, quien se enfrenta a crecientes presiones tanto desde el ámbito interno como internacional.