Este jueves 18 de diciembre, los socios de APTRA realizaron una votación clave para definir el futuro de Evelyn Von Brocke dentro de la institución, luego del escándalo que protagonizó con Marcelo Polino. La expectativa fue alta y el desenlace marcó un hecho inédito para la entidad que entrega los premios Martín Fierro.

Antes de la votación, tanto Von Brocke como Polino expresaron públicamente sus posturas. A ellos se sumaron las opiniones de periodistas como Nancy Duré y Susana Roccasalvo. La reunión se desarrolló sin la presencia de Luis Ventura, quien llegó tarde y no pudo emitir su voto.

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La resolución se conoció a través de los programas de espectáculos. Denise Dumas reveló al aire de LAM que la periodista había sido expulsada y calificó la decisión como “tremenda”. Minutos después, Ángel de Brito aportó los datos concretos de la votación y confirmó que 29 socios votaron por la expulsión y 12 por su continuidad. Con ese resultado, Evelyn Von Brocke se convirtió en la tercera persona expulsada en la historia de APTRA.

El conflicto que derivó en esta decisión se originó a partir de declaraciones de Von Brocke sobre el presunto patrimonio de Marcelo Polino. Esos dichos generaron un fuerte malestar y llevaron al periodista a solicitar formalmente su expulsión, al considerar que se había difundido información maliciosa y falsa dentro de los canales internos de la asociación.

La polémica escaló aún más en el programa LAM, donde Marcelo Polino protagonizó un tenso cruce con Augusto “Tartu” Tartúfoli. Durante el debate, Tartúfoli planteó la necesidad de permitir voces disidentes dentro de una organización, pero Polino reaccionó con dureza y comparó la situación con una acusación grave e infundada, remarcando que el mensaje cuestionado circuló en un chat compartido por todos los socios de APTRA.

El intercambio subió de tono y dejó expuestas las profundas diferencias sobre el caso. Polino sostuvo que avalar la conducta de Von Brocke implicaba coincidir con ella, mientras que Tartúfoli intentó despegar el debate de una cuestión personal, sin lograr descomprimir el conflicto.

Con la expulsión ya consumada, APTRA cerró uno de los episodios más conflictivos de su historia reciente, en medio de un debate que excedió lo institucional y volvió a poner en primer plano las tensiones internas del periodismo de espectáculos.