Desde la municipalidad se asegura que este evento representa "la peor catástrofe natural en la historia" de la ciudad.
El intenso temporal que azotó Corrientes durante la madrugada del domingo dejó numerosas zonas inundadas, edificios devastados y viviendas sumergidas bajo el agua, con un saldo de más de 800 evacuados en toda la provincia. Desde la Municipalidad de Corrientes, se advirtió que este evento fue catalogado como "la peor catástrofe natural de la historia" de la ciudad. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) mantiene la alerta por precipitaciones para el domingo y el lunes.
Según el Instituto Correntino del Agua y del Ambiente (ICAA), en tan solo cuatro horas cayeron 300 milímetros de agua, con un récord de 200 milímetros en una hora. El gobernador Gustavo Valdés recorrió la ciudad para evaluar los daños y las necesidades de los vecinos, mientras que el Comité de Crisis del Gobierno de Corrientes continúa analizando los daños y planificando soluciones, así como la asistencia social a los afectados.
El temporal provocó un colapso en los sistemas de desagüe debido a la intensa lluvia y los fuertes vientos. La Municipalidad anunció la evacuación de personas de las zonas más afectadas por las inundaciones y puso a disposición líneas de contacto gratuitas para la asistencia.
Los daños causados por el temporal requerirán trabajos de reconstrucción y asistencia durante las próximas 48 horas. Hubo voladuras de techos, caída de postes, árboles y carteles, así como el derrumbe de un histórico mural del convento de San Francisco y la voladura de techos en el campus de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional del Nordeste.
El servicio de energía eléctrica colapsó en la ciudad y se suspendió el suministro en toda la zona hasta el mediodía, mientras que se trabajaba para desagotar las subestaciones afectadas por el agua. El Gobierno de la Provincia suspendió las clases en todos los niveles educativos y la Universidad Nacional del Nordeste también suspendió las clases en Corrientes y en Resistencia, Chaco.
El Ministerio de Seguridad de la Nación, a través de la Prefectura Naval Argentina y Gendarmería Nacional, coordinó acciones de asistencia y contención de los ciudadanos en emergencia, recorriendo barrios afectados por las inundaciones y respondiendo a sus requerimientos de asistencia.
Además, se registraron saqueos en algunos establecimientos comerciales, lo que agregó tensiones a la situación ya complicada por el temporal.
