Se registraron reclamos en todo el país debido a los despidos y la aparente paralización del Conicet (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas).
La comunidad científica se encuentra movilizada y ha expresado su preocupación por los despidos, que ya suman 160, incluyendo una nueva tanda de 50 despidos de personal administrativo, así como por lo que describen como un "brutal ajuste" implementado por el gobierno ultraderechista de Javier Milei. La consigna de la jornada nacional de lucha en defensa del Conicet fue "¡En Conicet no sobra nadie!", refiriéndose al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas, reconocido como la mejor institución científica de Latinoamérica.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), se llevaron a cabo dos convocatorias: por la mañana, se realizó un acto en el Polo Científico en Palermo, donde habló el biólogo molecular Alberto Kornblihtt, un referente de la comunidad científica argentina. Por la tarde, en un plenario masivo de científicos, se consensuó un documento que detalla la preocupante situación de la ciencia y la tecnología en el país, a menos de dos meses de la asunción del nuevo gobierno.
En diversas ciudades como Córdoba, Bahía Blanca, Neuquén, Mendoza, Entre Ríos, Santa Fe, Rosario, Posadas, La Plata y Mar del Plata, entre otras, se llevaron a cabo protestas y manifestaciones. Las banderas expresaban el retroceso que implica la pérdida de puestos de trabajo y la demora en la publicación de los resultados de la convocatoria de Becas y Promociones. La incertidumbre sobre el futuro de la investigación científica en el país es palpable, y algunos científicos señalan que podrían enfrentar dificultades para mantener sus proyectos hasta junio de este año.
Este episodio refleja la preocupación generalizada en la comunidad científica argentina sobre la continuidad y el desarrollo de la investigación y la ciencia en el país.
